“Sabemos el impacto brutal, terrible, que tiene la inflación en la vida de la gente. Habían venido a eso, a devaluar. El precio del dólar era 9,74 cuando dejé la presidencia. Cuando el genio de las finanzas, Prat Gay, dijo que en realidad los precios estaban con un dólar a 15 o 16 pesos, y todo al demonio. A mí me sentaron acá diciéndome que le había causado un perjuicio al Estado por 55 mil millones de pesos. Y ellos trajeron al Fondo Monetario Internacional. Hoy los argentinos debemos 44.000 millones de dólares más y ustedes (en referencia a los jueces), también son responsables”.